Casi todos los aspectos de las actividades humanas a todos los niveles se han visto afectadas en el último año y medio a raíz de la pandemia actual del Covid-19. Las actividades de investigación y conservación de la biodiversidad no fueron la excepción. Consultamos a algunos de los socios de sitios de la Red para comprender mejor de qué forma sus actividades enfocadas en el monitoreo y la conservación de aves playeras han sido afectadas y cómo se han sorteado los obstáculos para que las aves playeras continúen en primer plano.
Todos los sitios consultados sufrieron alguna afectación en la implementación de sus actividades en el marco de las restricciones propias de cada país, y en las decisiones a nivel institucional y personal para evitar los contagios.
Durante los primeros meses de la pandemia el mundo entró en un aislamiento bastante estricto en la gran mayoría de lugares para evitar la dispersión del virus, este aislamiento estricto coincidió con el inicio de la primavera en el hemisferio norte y por lo tanto con la época reproductiva de las aves playeras.
Muchos sitios de la Red durante la primavera y el verano en el hemisferio norte realizan censos, actividades de monitoreo, festivales, visitas al campo con estudiantes de colegios y universidades entre otros. Todo eso se canceló o ajustó para realizarse de otras formas y mantener los monitoreos de especies en los sitios, y a las comunidades que apoyan y aprenden de la conservación de aves playeras vinculadas.
En Mono Lake se habían planificado censos de Falaropos desde lanchas y avionetas para comparar los métodos de censo. Los vuelos se cancelaron debido al riesgo de contagio en las cabinas, los censos en lancha continuaron con el personal usando tapabocas, y el donante fue flexible en permitir adicionar más censos en lancha en lugar de los vuelos. Se decidió centrar los esfuerzos en los censos en lancha porque son intrínsecamente más independientes que los vuelos y menos propensos a la cancelación debido a la pandemia u otras razones imprevistas (como el clima extremo, por ejemplo).
Izquierda: Nubes de Falaropos en el Sitio Mono Lake. Foto: Sam Rapp. Derecha: Sarah Hecocks monitoreando Falaropos en Mono Lake. Foto Ryan Carle.
En Georgia Barrier Islands las actividades educativas y de vigilancia de nidos en las playas se interrumpieron y otras se cancelaron. Las actividades educativas y de educación que normalmente requieren reuniones, talleres o encuentros cercanos con personas se transformaron en exitosos y multitudinarios eventos virtuales usando plataformas digitales modernas. Se ha evidenciado un mayor compromiso de los socios y del público a través de plataformas virtuales, lo que quizás no hubiera sucedido sin los cambios sociales más amplios que resultaron de los cierres y el cambio a las oportunidades de aprendizaje en línea.
Las actividades del programa reTurn the Favor en la Bahía de Delaware se pospusieron en 2020 y se ajustaron para 2020 y 2021. Los censos que monitorean el desove de Cangrejos Herradura en la Bahía de Delaware fueron cancelados en 2020. Los huevos de Cangrejo Herradura son una importante fuente de alimento para las aves playeras en migración durate su viaje a las zonas de reproducción.
Para continuar con las actividades de reTurn the Favor se reevaluó la necesidad, la oportunidad y los intereses para guiar las decisiones y adaptar las actividades. Los voluntarios estaban deseosos de hacer algo de valor con su tiempo, y el programa podía proporcionar esas oportunidades. Se reestructuraron las actividades para tener grupos más pequeños y asegurar el distanciamiento social, se realizaron capacitaciones virtuales y se limitaron las oportunidades de voluntariado para incluir sólo voluntarios experimentados. El proceso ayudó a identificar los puntos fuertes del programa y de la base de voluntarios, y también fue un desafío encontrar nuevas formas de comunicar y realizar capacitaciones que se mantendrán en los próximos años.
Las restricciones estrictas de la pandemia y la posterior apertura hacía la ¨nueva normalidad¨ se vivieron y siguen viviendo de formas muy diferentes en todo el continente. Las restricciones como el uso obligatorio de tapabocas, restricciones de movilidad y cierre de fronteras han variado de país a país, creando un rango amplio de adaptaciones.
En Sinaloa en la costa Pacífica en México en la Bahía de Santa María las actividades de planificación continuaron y aún se realizan de forma virtual. Fue posible mantener la implementación de muchas de las actividades en terreno oficializando las colaboraciones y contratando a personas de las comunidades locales. Sin embargo la implementación de actividades en terreno que dependen totalmente de personal de Pronatura Noroeste presente, como por ejemplo la vigilancia de playas para evitar el ingreso de ganado, se interrumpieron. Debido a la imposibilidad de viajar y movilizarse Pronatura Noroeste ha logrado participar de eventos virtuales de planificación de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) en Sonora y Sinaloa, aumentando así la incidencia en esos espacios.
A diferencia de la mayoría de países en América Latina, Nicaragua no aplicó ninguna restricción oficial. Sin embargo, para evitar el contagio de sus empleados las empresas camaroneras presentes cerca del sitio Delta del Estero Real en la costa Pacífica de Nicaragua prohibieron el paso de personas no asociadas a las empresas. Esta prohibición interrumpió el ingreso al sitio RHRAP / WHSRN, dificultando la realización de conteos de aves y el estudio de buenas prácticas de producción de camarón compatibles con las aves playeras. Sin embargo, poco a poco fue posible retomar el diálogo con productores y realizar un taller de buenas prácticas de producción de camarón compatibles con las aves playeras con sesiones, así como conteos y actividades con la comunidad. Como en otros lugares el aislamiento contribuyó a los eventos virtuales que en este caso se atrajeron nuevas audiencias, particularmente a algunos productores de camarón.
Izquierda: Taller buenas prácticas con personal de una camaronera en el Sitio RHRAP / WHSRN Delta del Estero Real, Nicaragua. Derecha: Plantando manglar en el Sitio RHRAP / WHSRN Delta del Estero Real, Nicaragua. Fotos: Salvadora Morales.
Siguiendo por la costa Pacífica pero esta vez en América del Sur en el Delta del Río Iscuandé en Colombia todas las actividades se retrasaron, y los viajes de la Asociación Calidris a la zona se disminuyeron. Para preparar su regreso al sitio RHRAP / WHSRN y a otras zonas, Calidris desarrolló un protocolo de bioseguridad para aplicar durante los viajes y trabajo de campo, para evitar contagiar a las comunidades locales apartadas con las que trabajan, así como el contagio propio. El protocolo incluyó hacer talleres y reuniones al aire libre, donde todos los asistentes usan tapabocas, y se mantiene la distancia personal en las ¨zonas de vida o zonas seguras¨, espacios delimitados con cinta o marcas en el suelo donde los visitantes de Calidris y la comunidad local permanecen separados.
Izquierda: Delimitación de la ¨Zona de Vida¨ durante talleres en el sitio Delta del Río Iscuandé. Foto: Asociación Calidris. Derecha: Aspectos del protocolo de bioseguridad elaborado por Asociación Calidris para reuniones con la comunidad local del sitio Delta del Río Iscuandé. Imagen: Asociación Calidris.
En los tres sitios RHRAP / WHSRN en Ecuador Piscinas Artificiales de ECUASAL, Refugio de Vida Silvestre Isla Corazón y Fragata (REVISICOF) y Canal de Jambelí, las actividades disminuyeron. En el primero la producción de sal continuó y el monitoreo de aves playeras se mantuvo. Sin embargo en REVISICOF que es manejado por el Ministerio del Medio Ambiente, Agua y Transición Ecológica, se redujo la presencia de personal especialmente la presencia de guardaparques y técnicos. En el Canal de Jambelí las comunidades locales administradoras del territorio tuvieron grandes impases económicos, ya que debido a las restricciones no realizaron sus faenas de colecta de camarón disminuyendo así sus ingresos.
En tiempos pre-pandémicos se inició la evaluación de servicios ecosistémicos en los Humedales de Maullín y los Humedales Orientales de Chiloé como apoyo a la designación de estos sitios como Santuarios de la Naturaleza en Chile. Sin embargo para el momento de socializar los resultados, recibir retroalimentación de las comunidades y autoridades locales, y la aprobación de la evaluación ya el mundo estaba en cuarentena, y particularmente en Chile en aislamiento estricto. Fundación Conservación Marina con el apoyo de los donantes transformaron las reuniones presenciales en talleres virtuales, y aseguraron la conectividad de las personas y autoridades locales cubriendo los costos de conexión con tarjetas prepago.
Retroalimentación con comunidades y autoridades locales de los sitios Humedales de Maullín y Humedales Orientales de Chiloé sobre la evaluación de servicios ecosistémicos.
En la costa Atlántica de América del Sur, en el Estuario del Río Gallegos en Argentina se implementaron actividades virtuales de sensibilización y capacitación. Las actividades de monitoreo y conservación no estuvieron reguladas por parte de la autoridad encargada de los protocolos de bioseguridad, por lo que obtener permisos de movilización para realizar esas actividades no fue posible. A partir de agosto de 2021, Ambiente Sur firmó con la autoridad a cargo un convenio que permitió comenzar a realizar las actividades de conservación.
La interacción con productores y propietarios de establecimientos clave para las aves playeras se dificultaron debido a la pandemia en Laguna de Rocha en Uruguay. Otras actividades de campo y las propias de control y vigilancia se afectaron debido al cierre de las Áreas Protegidas nacionales debido al aumento de casos de Covid-19 en el país.
Para finalizar, en Laguna Mar Chiquita en el centro de Argentina donde la Fundación Líderes de Ansenuza a través de su programa educativo y de involucramiento comunitario Experiencia Ambientalia apoya los esfuerzos para la designación del Parque Nacional Ansenuza. Ambientalia ha sorteado muchos obstáculos principalmente en torno al número de personas permitido para participar de las actividades grupales. La Fundación destaca que debido a la disminución de oferta de actividades enfocadas en los jóvenes de la zona, estos jóvenes se han acercado más a Ambientalia y al proceso de designación del Parque.
Izquierda: Materiales de capacitación del programa Experiencia Ambientalia. Derecha: Salida al campo con estudiantes de Experiencia Ambientalia. Fotos: Fundación Líderes de Ansenuza.
Las soluciones innovadoras que usaron estos sitios RHRAP / WHSRN para sortear los obstáculos y complicaciones para implementar actividades debido a las restricciones para mitigar la pandemia de Covid-19, son una muestra de resiliencia, capacidad de adaptación, imaginación y creatividad. También es indiscutible el rol facilitador y comprensivo de los donantes y socios de estos sitios, permitiendo adaptar actividades y confiando en las decisiones de quienes conocen los territorios.
Así como se aprendieron a usar más ampliamente las herramientas virtuales para atraer nuevas audiencias y realizar eventos masivos en el marco de las restricciones; es posible se haya pasado por alto el impacto que las restricciones impuestas hayan tenido en las actividades de control y vigilancia de zonas importantes para las aves playeras, o el efecto de flexibilizar las restricciones. A la fecha se desconoce el impacto de la disminución en el control de perturbaciones y vigilancia durante el aislamiento estricto, así como de las actividades humanas luego de la ¨apertura¨. Sería prudente iniciar la conversación acerca de cómo determinar los efectos de la interrupción de las actividades de conservación en las poblaciones de aves playeras.
Si quiere compartir información sobre como su sitio se adaptó a los retos de las restricciones impuestas por la pandemia, puede contactar a Isadora
Foto de Portada: Falaropos en el Sitio RHRAP / WHSRN Mono Lake. Photo: Ryan Carle.
