Por Ana Laura Sureda,Flavio Moschione, Leonidas Lizárraga y Carina Rodríguez – Administración de Parques Nacionales
La Laguna de los Pozuelos es uno de los humedales más extensos en el noroeste argentino; constituye un verdadero oasis a 3.665m de altitud en la Puna de Jujuy, siendo el primer sitio continental altiplánico en la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP / WHSRN por sus siglas en inglés), declarado en mayo de 2014.
El espejo de agua es naturalmente muy fluctuante año a año, llegando a superar los 130 km2, y está gestionado como un Área Protegida Nacional, siendo además zona núcleo de la Reserva de Biosfera homónima que incluye los 3.800 km2 de la cuenca de Pozuelos.
El abundante y particular elenco de aves acuáticas que congrega Pozuelos todo el año constituye uno de los atractivos y valores de conservación destacados y ha sido objeto de numerosos relevamientos y estudios desde su designación como Área Protegida en el año 1980. A partir de 1996, el sitio fue incluido en el Censo Simultáneo Internacional de Flamencos Altoandinos que lleva adelante periódicamente el Grupo de Conservación de Flamencos Altoandinos (GCFA).
Desde 2006 se realizan al menos seis censos integrales sobre aves acuáticas al año: de verano (febrero), invierno (julio), primavera (octubre y noviembre) y otoño (marzo y abril); estas dos últimas estaciones son clave para el registro de las especies migratorias en el sitio. Las fechas de monitoreo se articulan con el Censo Neotropical de Aves Acuáticas (WI-AvA), con los Censos Simultáneos Internacionales de Flamencos Altoandinos (GCFA) donde se también se incluye Lagunas de Vilama en cooperación con el Ministerio de Ambiente de Jujuy, y más recientemente con el protocolo del Censo Internacional de Playeras (ISS), y los recuentos de primavera y otoño del Gran Día Mundial de Observación de Aves (Global Big Day) del Laboratorio Cornell.
Izquierda: Falaropo de Wilson (Phalaropus tricolor). Laguna de Pozuelos, Jujuy, Argentina. Derecha: Chorlo Pampa (Pluvialis dominica). Laguna de Pozuelos. Fotos: Flavio Moschione.
Los monitoreos son realizados por personal técnico y cuentan con la participación de guardaparques, brigadistas y voluntarios. Los resultados se muestran a través de un Visor Web en el Sistema de Información de Biodiversidad de la APN:https://sib.gob.ar/novedades/monitoreo-de-aves-acuaticas-en-el-monumento-natural-laguna-de-los-pozuelos2
Como resultado de estos estudios se han registrado 30 especies de aves playeras en el sitio, siendo dominantes por su abundancia y recurrencia tres especies migratorias de larga distancia, el Falaropo Común (Phalaropus tricolor) con registros de hasta 123.000 individuos, el Playerito Unicolor (Calidris bairdii) con registros de hasta 36.350 individuos, y el Playerito Zancudo (C. himantopus) con 9.900, así como la especie residente Chorlito Puneño (Charadrius alticola) con hasta 5.650 individuos.
En Pozuelos se registran de manera regular algunas especies poco frecuentes en Argentina como el Playerito Menor (C. minutilla) y el Playerito Enano (C. pusilla), que aparentemente podrían estar más vinculados al corredor del Pacífico, como también es el caso del Playero Blanco (C. alba). También se han registradoCh. wilsoniay Limosa fedoa, ambos registros únicos para el país.
En febrero de este año fue posible realizar el monitoreo de verano simultáneamente con el Censo Internacional de Flamencos de amplia cobertura del GCFA y el Censo de Falaropos 2020, justo antes que se declarara la emergencia sanitaria por COVID-19. La laguna de los Pozuelos estuvo bastante seca para la época, y se registraron bastante menos individuos que lo usual: 8.545 Falaropos, y 11.400* individuos de 11 especies de playeras en total. Sin embargo dado que con motivo de la ejecución del censo de aves playeras se abarcaron todos los humedales importantes en el altiplano del noroeste argentino, pudieron encontrarse concentraciones importantes en otros sitios de la puna jujeña: 6.772 Falaropos en Laguna Guayatayoc (6.913* individuos de 4 especies de playeras) y 143.649 en Laguna Palar, del complejo Vilama (donde se registraron 149.258* individuos de 11 especies, considerando el Sitio Ramsar completo), números allí no frecuentes que refuerzan la hipótesis de que los sitios altoandinos funcionan en red como alternativos, respondiendo a las fluctuaciones climático-ambientales habituales en la Puna.
El área no sólo es importante para las aves playeras; también es un sitio muy relevante para aves acuáticas. Muchas de ellas, endemismos puneños con importantes poblaciones, como la Soca Cornuda (Fulica cornuta). Su entorno es asimismo muy importante para la conservación de poblaciones de Vicuña (Vicugna vicugna) y Suri (Pterocnemia tarapacensis).
Los relevamientos y monitoreo periódicos son claves para la conservación del sitio y son una herramienta importante para los manejadores y diferentes instituciones que participan activamente en proyectos de investigación, monitoreo y conservación, para hacer frente de manera efectiva y coordinada a las diversas amenazas que enfrenta el sitio.
*Las cifras incluyen a los falaropos, que se presentan como una especie dominante en el elenco de las aves playeras en el altiplano.
Foto Portadas: Parinas Chicas (Phoenicoparrus jamesi), Falaropos y Playeritos de Baird. Laguna de Pozuelos, Argentina. Foto: Flavio Moschione.
