Algunos playeros están adaptados a los ambientes de pastizal. Este es el caso del Playero Canela (Calidris Subruficollis), especie insignia del sitio de Importancia Regional de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP / WHSRN por sus siglas en inglés) Sabanas de Paz de Ariporo y Trinidad, Colombia. Desde 2015 la Asociación Calidris ha registrado regularmente unos 500 individuos del Playero Canela en el sitio, con un número máximo de 700 lo que corresponde a un 1,25% del tamaño poblacional estimado en 56.000 individuos.
La ganadería tradicional es un componente esencial de la cultura llanera1 de Colombia y hoy gracias a las prácticas tradicionales que permanecen es posible apreciar la gran biodiversidad de las sabanas, incluyendo al Playero Canela. Entre marzo y abril de 2023, Joaquín Aldabe y Nicolas Marchand Especialistas en Ganadería y Conservación de Aves Playeras de la Oficina Ejecutiva de RHRAP / WHSRN- Manomet tuvieron la oportunidad de visitar los Llanos colombianos y apreciar el comprometido trabajo que lidera la Asociación Calidris con familias de ganaderos que habitan el sitio RHRAP/WHSRN.
Las principales amenazas percibidas son el avance de la frontera agrícola (ej. aumento del área destinada al arroz), el uso inadecuado del fuego (ej. por supresión o abuso del mismo), lo cual ha afectado negativamente el paisaje actual de las sabanas del sitio RHRAP con una arborización o invasión por especies leñosas favorecidas por el fuego como el chaparro (Curatella americana).
Les compartimos algunas fotos de la visita:
Esta experiencia nos recalcó la importancia de seguir apoyando y conectado las familias ganaderas a lo largo del hemisferio y rutas migratorias de las aves playeras, para fortalecer sus sistemas productivos en favor de la naturaleza, agregar valor a una producción agropecuaria que conserva biodiversidad, facilitar el acceso a incentivos que premian a quienes producen conservando, y difundir ejemplos exitosos de conservación/producción. Al tiempo que también se fortalecen las oportunidades de turismo naturaleza, investigación y desarrollo sostenible que estos maravillosos sitios ofrecen y complementan a la economía familiar.
Creemos que estamos dando pasos iniciales pero firmes, para incrementar el intercambio y la colaboración; y propiciar oportunidades para desarrollar procesos que ayuden a los productores a tener sistemas productivos siendo más ficientes, manteniendo el foco natural de su producción, lo que a la vez contribuirá a resistir mejor los embates de la frontera agrícola y/o alternativas de intensificación convencional que degradan los recursos naturales.
Foto de portada: Reserva Natural de la sociedad Civil finca Buenaventura en Altagracia en los Llanos. Foto: Nicolas Marchand.