By: Isadora Angarita-Martinez (WHSRN Executive Office, Manomet), Diana Eusse, Patricia Falk, Dina Estupiñan and Jessica Suarez (Asociación Calidris)
Con el pasar de los años, las comunidades humanas han ganado mayor relevancia en la toma de decisiones de manejo que afectan de manera directa a la conservación de las áreas claves de las que dependen y que son también importantes para la biodiversidad. Con este enfoque de conservación que considera los beneficios que las comunidades locales reciben de los sitios importantes para la biodiversidad, se evaluaron de forma participativa los servicios ecosistémicos en el Delta del Río Iscuandé. Los resultados de la evaluación permitieron determinar las acciones necesarias para garantizar su provisión a largo plazo y contribuir también a la conservación de las aves playeras y sus hábitats. Las acciones a ser implementadas serán lideradas principalmente por la comunidad local y por otros actores interesados en el sitio.
El Pacífico colombiano es reconocido por su enorme biodiversidad, sustentada en su posición geográfica estratégica y su complejidad de ecosistemas. La costa Pacífica del sur de Colombia, además de albergar los manglares más altos y conservados de todo el Pacífico americano, es también muy importante por las zonas críticas de descanso y abastecimiento durante los viajes migratorios de las aves playeras y de alimentación y reproducción para las especies residentes. Esta importancia fue reconocida con la designación en 2009 del Delta del Río Iscuandé como el primer sitio en Colombia de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (WHSRN por sus siglas en inglés). Este lugar además de albergar anualmente 50.000 aves playeras en migración, es un sitio del cual dependen para sus actividades diarias y supervivencia 2.200 personas del territorio colectivo Consejo Comunitario Esfuerzo Pescador.
En el Sitio RHRAP-WHSRN Delta del Río Iscuandé se encuentran los manglares mejor conservados del Pacífico americano. Sin embargo, la tala es una amenaza constante a los medios de vida de las comunidades locales y para las aves playeras. Fotos: Asociación Calidris
Con la evidencia de cambios en la provisión de ciertos servicios ecosistémicos que la comunidad local recibe del sitio RHRAP-WHSRN, se inició en 2019 una evaluación participativa de los servicios ecosistémicos. Las causas de estos cambios se pueden atribuir a los efectos del cambio climático, contaminación por residuos sólidos y metales pesados y tala de bosque de mangle. Estos cambios impactan los medios de vida y actividades de los habitantes del Consejo Comunitario del sitio RHRAP, y aunque no son nuevos para sus habitantes, se han intensificado con el pasar del tiempo[1]. Por ejemplo, el aumento del nivel del mar y la contaminación afectan la provisión de agua para consumo y actividades de los hogares. El aumento de la temperatura del mar altera los patrones de productividad de los bosques y del recurso pesquero, lo que incrementa la sobreexplotación y sus impactos. La erosión costera y sedimentación de ríos y esteros afecta la estabilidad del terreno donde están construidas las casas y aumenta las distancias y los caminos recorridos en las faenas de pesca.
Debido a la inestabilidad de los terrenos por efectos del cambio climático y las dinámicas del mar sobre la costa, el poblado del Delta del Río Iscuandé tuvo que cambiarse a lugares más alejados de la costa, la productividad pesquera también ha disminuido como consecuencia del aumento de la temperatura del mar. Fotos: Asociación Calidris (izquierda) y Alexander González (derecha).
Las aves playeras sufren efectos similares debido al aumento de contaminantes y sedimentos, y a la reducción de la productividad primaria del sitio por la tala de los manglares, que incluyen, entre otros, el cambio en el tamaño y la calidad de las áreas de alimento o de descanso. Estos cambios podrían tener impactos en la supervivencia y éxito reproductivo de las aves, al aumentar el esfuerzo en completar sus requerimientos energéticos para migrar o para reproducirse, o al incrementar el tiempo y la distancia invertida en buscar alimentos y zonas de descanso cada día.
Los manglares del Delta del Río Iscuandé ofrecen recursos importantes para la comunidad local y son sitios críticos de descanso para las aves playeras migratorias y residentes. Fotos: Asociación Calidris (izquierda) y Richard Johnston (derecha).
La evaluación se realizó a través de talleres con la comunidad enfocados en usar el mejor conocimiento local y técnico, impulsar la participación activa de diferentes grupos de la comunidad, recopilar información y analizarla en un proceso de ¨aprender haciendo¨, y promover la toma de decisiones para el resguardo de los servicios ecosistémicos considerando varios escenarios y la mejor información disponible. La evaluación permitió obtener información de primera mano sobre aquellos productos y recursos que son críticos para la comunidad. El aprovisionamiento de agua, alimento y productos asociados al bosque fueron priorizados para analizar.
Se encontró que la lluvia y el río son las principales fuentes de abastecimiento de agua que se usan especialmente para el aseo, higiene personal, el consumo y la preparación de alimentos. El 80% de los alimentos que se recolectan son para comercialización y el 20% para consumo propio. Aunque los alimentos son colectados en todos los ecosistemas, el manglar es el ecosistema del que más productos se aprovechan y el 50% de las familias depende de la pesca para su sustento y comercialización. Es evidente entonces que asegurar las fuentes de abastecimiento de agua y alimentos o buscar otras alternativas es primordial para esta comunidad, y afecta positivamente también a las aves playeras debido a que la comunidad guardiana de sus áreas importantes se mantendría en el sitio RHRAP-WHSRN.
El agua es un elemento fundamental en la vida de los seres humanos. En comunidades que dependen primordialmente de la lluvia para su abastecimiento, los cambios en los regímenes climáticos pueden tener efectos alarmantes. Foto: Asociación Calidris.
Por lo tanto, integrar las necesidades de la comunidad local con las de las aves playeras es una de las claves para la conservación efectiva del sitio RHRAP-WHSRN. Esa integración se basa en la toma de decisiones informadas que apoyan la conservación de la biodiversidad y la provisión continúa de servicios ecosistémicos, y en la identificación de estrategias de manejo para mantener y mejorar la sustentabilidad económica, ambiental y el bienestar humano.
Los siguientes pasos de este proceso son compartir los resultados con autoridades locales y regionales, organizaciones de la sociedad civil y academia en los próximos meses. Además, integrar estos resultados a las políticas públicas, planes sobre adaptación y mitigación al cambio climático y de manejo integral de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos. Finalmente, contribuir a fortalecer las capacidades de participación de las comunidades y grupos locales, ya que serán ellos quienes continuarán tomando las decisiones de conservación de la naturaleza en su territorio, esta vez integrando las acciones identificadas en la evaluación que favorecen el bienestar humano y las aves playeras.
Comunidades más informadas de los beneficios que reciben de la naturaleza, preparadas para implementar los cambios requeridos para mantener la provisión continua de esos beneficios y participando activamente de la toma de decisiones con base en la integración de las políticas públicas y las necesidades locales, aseguran no solo su bienestar sino también la conservación de la biodiversidad de la cual dependen. Foto: Asociación Calidris.
Esta evaluación con el Consejo Comunitario Esfuerzo Pescador se realizó en paralelo con el Consejo Comunitario de Comunidades Negras de la Isla Punta Soldado (Buenaventura, Valle del Cauca). El documento final presenta resultados para los dos Consejos Comunitarios, sin cuyo interés y participación activa la evaluación no hubiera sido posible. La participación activa de las comunidades y el liderazgo de la Asociación Calidris fue primordial para que la evaluación se completara, el apoyo financiero del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos y el apoyo técnico de la Oficina Ejecutiva de la Red Hemisférica facilitaron el proceso. Aunque los resultados son específicos para dos sitios en el Pacífico colombiano, la experiencia y la forma en que la evaluación fue construida es escalable a otros sitios RHRAP/WHSRN.
Si usted tiene interés en conocer el documento final con la compilación de los resultados puede descargarlo aquí. Si quiere conocer más sobre el proceso específico en los dos Consejos Comunitarios puede comunicarse directamente con Diana Eusse y Patricia Falk – Fernandez de la Asociación Calidris. Si quiere adelantar una evaluación de servicios ecosistémicos en su sitio importante para las aves playeras o saber más al respecto por favor comuníquese con nuestra especialista Isadora Angarita-Martínez.
[1] Increase in sea level of 20 mm each year since 2000, which results in 40 cm by 2020 and close to 1 m in 2050.
Foto portada: Aves playeras en el sitio RHRAP -WHSRN Delta del Río Iscuandé, Colombia. Foto: Asociación Calidris.